Hoy en día la oficina de farmacia tiene que competir no solo con su propio sector farmacéutico sino con otros sectores, como as grandes superficies, perfumerías, etc. Por todo ello, la fidelización de nuestros pacientes/clientes es esencial. Ellos pueden conseguir con bastante probabilidad los mismos productos en distintos establecimientos, por lo que la atención que les demos será lo que determine si volverán a nuestra oficina de farmacia o elegirán comprar fuera de la misma.

Una de las maneras que tenemos para fidelizar a nuestros clientes e incentivar el consumo de parafarmacia es el uso de las ya conocidas tarjetas de fidelización. Hay muchas maneras de poder implementarlas.
– Podemos tener tarjetas de fidelización físicas, que nos podrá ayudar a que nuestros clientes se acuerden de nosotros siempre que las vean y a incorporar sus nombres rápidamente dentro del programa cuando vengan a la farmacia, de tal manera que la atención se facilita y se agiliza.
– Sin embargo, cada vez estamos más llenos de tarjetas de fidelización de distintos lugares y cada vez es más común que la gente no haga uso de las tarjetas físicas. Es cada vez más común que las tarjetas de fidelización sean virtuales, de tal manera que solamente dando el nombre o algún dato de la persona ya podamos entrar en su ficha.

Una vez que hemos dado de alta al cliente rellenando todos los datos que exige la ley de protección de datos, podemos tratar las compras de nuestros clientes de diversas maneras.
– Una de ellas sería ofreciéndoles descuentos en el momento de la venta, que sólo se podrían utilizar en productos de parafarmacia, como marca la ley. Esta manera de realizar descuentos realmente no conlleva una fidelización potencial ya que se está dando el “premio” por venir a la oficina de farmacia en el momento de la venta, no incentivando una posterior compra.
– La manera más recomendable de generar la fidelización y retorno del cliente siempre va a ser a través de puntos o vales. En este sentido, los puntos son más sencillos y limpios de utilizar.

Cómo poner en marcha la tarjeta de fidelización
– Los artículos de la oficina de farmacia deberán estar asignados en familias en las que previamente hemos asignado unos márgenes determinados con los que queremos trabajar, y sobre los cuales permitiremos realizar ciertos descuentos. Evidentemente estamos hablando sólo de parafarmacia y de aquellos productos que sean beneficiosos e interesantes de promocionar.
– Generaremos tantos tipos de promoción por puntos como promociones queramos ofrecer Por ejemplo, segmentar los productos en aquellos que tendrán un 3 % de descuento y aquellos que pueden tener, por ejemplo, un 5-%. Aquellos que tengan mayor descuento deberían de ser aquellos a los que previamente hemos asignado un mayor margen.
– A su vez, se pretende ir elaborando una lista de pacientes que se den de alta en el sistema
de tarjeta de fidelización, sobre quienes vamos a aplicar estas promociones, y no a todos. Aquellos pacientes que nos hayan cedido previamente sus datos, serán recompensados con dichos puntos que podrán utilizar desde la posterior visita o acumularlos en el tiempo, con o sin fecha de caducidad.

Podemos enfocar los descuentos de manera permanente de modo que quien tenga tarjeta de fidelización siempre obtenga este beneficio, o elaborar campañas puntuales, como pueden ser las actuales de Black Friday. Para esto último se desarrollará las campañas con una fecha y duración determinada, y se autocancelarán cuando se cumpla el plazo.

En resumen: la fidelización de los clientes es esencial para garantizar que vuelvan a la oficina de farmacia y poder competir en un sector cada vez más complicado. Tenemos que vincular los clientes con tarjeta de fidelización a los productos sobre los cuales queremos aplicar dichas promociones y elegir la temporalidad para las mismas. Para todo ello es necesario la implicación del equipo y fundamentar la concienciación del mismo para, en cada venta, solicitar si el paciente tiene tarjeta de fidelización u ofrecerla.

Desde Farmaimpulsa os podemos ayudar a implementar este proceso tan necesario.